1 jul 2011

Uno de Julio


Es decir, queda un mes.
Hasta no hace mucho tiempo no me hacía a la idea de que este exquisito manjar de la Física está demostrándome, y cada día con mayor intensidad, que se acabó lo que se daba. Ahora, a pocas semanas de que esta burbuja explote, no paro de pensar con qué me encontraré el último día del mes y, sobre todo, con qué me encontraré en estos treinta días colonienses que aún quedan. Mientras, tengo el placer de descubrir qué me depara cada día nada más levantarme. Las sorpresas y pequeños detalles especiales diarios nunca faltan.

También, y sobre todo al ojear todas las fotografías tomadas, no puedo evitar rememorar todos esos momentos especiales que han pasado con vertiginosa y cautivadora fugacidad desde que hace cuatro meses prometí que devoraría todo y que os hablaría un poco sobre ello. Os debo una - unas cuantas entradas -.

2 comentarios:

Elessar dijo...

Me alegro mucho, que siga así... y a exprimir al máximo cada día... me callo, ya sé que lo haces. :-P

MDoc dijo...

Bueno, visto que aún te quedan 20 días, aprovéchalos al máximo y sácale su jugo como creo que has estado haciendo todo este tiempo (y si no lo has hecho y tampoco has publicado, te damos ¬¬).

La verdad es que tiene que ser una gran experiencia. Este año se va una amiga mía de Erasmus y ya nos irá contando. Eso sí, yo no me animo.

Disfruta!